‘Parade’ es uno de mis discos preferidos: es equilibrado, elegante y agradable de escuchar. Se intuye una madurez musical exquisita.
Abril de 1985 representa el comienzo de un periodo en el que Prince demuestra una calidad musical impresionante, donde sus sesiones de grabación derrochaban muchísima inspiración. Finalizada la gira de ‘Purple Rain’ (el 7 de abril de 1985), Prince se mete de inmediato a grabar. Y es en ese abril de 1985, el día 21, donde nace la genial ‘Sometimes It Snows In April’. Un homenaje al abril más inspirado que pudo tener Prince nunca.
Y fue un abril inspirado, porque en solo 8 días (del 20 al 28 de abril), se realizaron las sesiones de grabación de las siguientes joyas: ‘Others Here With Us’, ‘Old Friends For Sale’, ‘Sometimes It Snows In April’, ‘Kiss’ y la impresionante ‘All My Dreams’. El contenido preliminar de ‘Parade’ incluía todas estas canciones, pero lamentablemente Prince descartó ‘Others Here With Us’, ‘Old Friends For Sale’ y ‘All My Dreams’.
Aun hoy no se entiende cómo pudo descartar esas canciones. Me imagino ‘Parade’ con esas joyas y ahora estaríamos hablando de un discazo espectacular. Agosto de ese misno año también dejó canciones geniales, como ‘Splash’, ‘Empty Room’, ‘Sexual Suicide’ y ‘Go’.
1985 fue un año de total inspiración. Las últimas composiciones que constituirán ‘Parade’ se terminan de grabar en noviembre y diciembre (caso de ‘Mountains’ y ‘Anotherloverholenyohead’). Y en marzo de 1986, después de finalizar ‘Under The Cherry Moon’, Prince continúa su inspiración creativa con un nuevo proyecto en la cabeza: ‘Dream Factory’.
La fábrica de sueños estaba constituida en julio de 1986: en gran medida, era el embrión de ‘Sign O’The Times’. Y con delicias como ‘Train’, ‘A Place In Heaven’ o, nuevamente, la genial ‘All My Dreams’.
Esta época, comprendida desde abril de 1985 hasta la configuración de ‘Dream Factory’, representa para mí la esencia más exquisita de Prince. Su música ha madurado mucho, y la contribución de ‘The Revolution’ alcanza aquí su máximo esplendor. Prince es una esponja que se deja inspirar, influyéndose por Wendy & Lisa, por Susannah, por Clare Fischer, por Miles Davis, por el jazz… por todo.
Aquí Prince estaba en su máximo esplendor creativo. Y creo que, aquí, fue cuando alcanzó su máxima esencia artística. Esta etapa final con ‘The Revolution’ demostró el máximo grado de compenetración de un equipo, que lamentablemente se disgregó oficialmente el 17 de octubre de 1986.
La fábrica de sueños se rompió, pero quizás reaparezca otra vez si Prince lo vuelve a desear. Ya se intentó recomponer la fábrica en el año 1998, con la abortada ‘Roadhouse Garden’… sometimes I trip on how happy we could be.