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La idea de este cuento me surgió hace unos días cuando mi sobrina me pidió un cuento para dormir  :zzz:y algo empecé a contarle sobre un Príncipe Púrura ( a los cinco minutos mi hermana me dijo que dejara de contarle tonterías ).

Alguien me dijo un día  que para escribir algo había que saber el principio y el final de lo que se quería  contar, luego era cuestión de poner imaginación. Pues ahí va algo con lo que me he atrevido. Dedicado a los que tienen imaginación y les gusta todavía que les cuenten cuentos.

Todos los personajes, lugares y situaciones son imaginarios ¿o no ?; cualquier parecido a la realidad es pura coincidencia.

El Príncipe Púrpura. Cuento.

"Érase una vez, en un país muy, muy lejano,  vivía un Pequeño Príncipe al que le gustaba bailar con botas de tacón alto y vestir ropa color púrpura; iba siempre acompañado de una guitarra  con la que regalaba algunos acordes a los que le quisieran oir  , pues había nacido con un don especial, hacer música y para ello vivía, por lo que repetía constantemente al pueblo "mi música es para ti y por ti" y soñaba con el día en el que todos la escucharan. Al chico le gustaba que le conocieran como el Príncipe Púrpura.

Hubo un tiempo en el que en este país la música era tan necesaria como el aire para respirar y el agua para beber y para el Príncipe Púrpura era vital que su música llegara a la gente, lo necesitaba .Él era bastante joven aún y apenas conocido; su música, y todo él  era tan diferente a lo que se escuchaba que  a la gente le costaba asimilar lo nuevo, algo que preocupaba enormemente al joven Príncipe  .

En este lejano país vivían, además de este Príncipe,  un Rey del Rock, un Rey y una Reina del Pop , aunque uno y otra no tenían mucho que ver, también un Rey del Soul,  incluso tiempo después apareció una Princesa del Pop y más y más personajes cuyos títulos  ahora no recuerdo. De vez en cuando aparecían por allí algunos miembros de monarquías y aristocracias vecinas, venidos allende los mares, como el gran Duque Blanco, o los  conocidos como Sus Satánicas Majestades e incluso alguien había oído decir que en otro lejano país existía hasta  un Rey del Pollo Frito y   un Príncipe gitano, pero de  éstos mejor no hablar .

Esta realeza representaba para el Príncipe algo a lo que él aspiraba alcanzar, vivir sólo por y para la música y repartirla por todo el mundo y sabía que si conseguía hablar con ellos podrían ayudarle a alcanzar su sueño, pero este joven Príncipe era también bastante tímido y no encontraba el valor suficiente para acercarse,  por lo que seguía con su guitarra haciéndola sonar para quien quisiera escucharle.

Un buen día, Sus Satánicas Majestades, de visita oficial por el país, oyeron hablar de aquel Príncipe que hacía música y quisieron saber más de él. Les gustó lo que oyeron y le ofrecieron la oportunidad de acompañarles para que su música fuera escuchada. El  Príncipe Púrpura, loco de contento, no lo dudó un segundo y aceptó inmediatamente el ofrecimiento acudiendo con ellos a uno de los palacios donde la gente iba para disfrutar de la música, preparando concienzudamente su actuación.

Nervioso por el hecho de mostrar su música a tanta gente, pues hasta ese momento sólo lo había había hecho ante grupos reducidos, mil novecientas noventa y nueve personas había sido lo máximo, el Príncipe no durmió la noche anterior  ; tal era su inquietud que  dudaba qué iba a tocar, qué ropa llevaría, tenía que encontrar su estilo para aquella ocasión, gustaría? .....

Shhhh, el Príncipe Púrpura va a cantar. Uf, aquéllo no salió como esperaba. Sólo siete tuvieron palabras de compasión para él al resto de los allí reunidos no les gustó su estilo  , sólo querían escuchar a los músicos venidos de lejos y no a aquél payaso vestido de forma rara y tocando algo que nunca habían escuchado, por lo que empezaron a abuchearlo e incluso llegaron a lanzarle tomates y a mofarse de él. "Tienes una mente sucia" le gritaban.

El Príncipe, apenado, se fué del escenario y no volvió a cantar. Montó en su pequeño corvette rojo y desapareció; "estoy tan triste " pensó "¿por qué me tratan tan mal? Si yo sólo quiero que bailen lento y suave"

Y el Príncipe dejó de cantar y de hacer música y la tristeza lo envolvió todo, el silencio se apoderó de aquel país, hasta se oían los lamentos de las palomas en los parques del lugar, pero de pronto, una mañana, cuando el Príncipe iba hacia su casa, en el ascensor, lo tuvo claro; "voy a hacer que la gente se vuelva loca con mi música y no voy a parar hasta que lo consiga, voy a trabajar para ello y voy a cambiar el signo de los tiempos" pensó. Y he aquí la sorpresa  , al abrir la puerta encontró unos duendes que anunciaban que estaban allí para ayudarle. El Príncipe no creía lo que veía  y entonces éstos empezaron a hablar: "Nosotros somos El Tiempo, y haremos música contigo para que la gente no pueda dejar de mover su cuerpo"; "Nosotras somos La Revolución y estamos aquí para ayudarte, moriríamos por ti"; "Yo soy La Gata que Baila y te acompañaré por el mundo bailando hasta llegar a la calle del Alfabeto, te deseo el cielo"; "Nosotros tenemos el Poder de la Nueva Generación y juntos cambiaremos el mundo, tu experiencia será dorada, tendrás diamantes y perlas", "No estás solo, estaremos siempre en tu vida".

Y entonces, una lluvia color púrpura inundó la habitación  y rápidamente se extendió por el norte, el sur, el este y el oeste; el sol, la luna y las estrellas se encontraron en el cielo al mismo tiempo y un arco iris lo iluminó fugazmente; empezaron a sonar notas musicales. "es mi música" dijo el Príncipe sorprendido. "Sí, pequeño genio" le contestaron aquellos duendes, "tu música no va a dejar de sonar nunca y vendrán miles de personas que la seguirán siempre, te querrán por lo que eres; tu música será la que oigan cuando celebren sus alegrías y cuando lloren sus penas, la que les recordará los momentos más importantes de sus vidas, la que les acompañará en sus largos viajes, la que les ayudará a encontrar a otras gentes que también la buscan, la que calmará sus horas de angustia, la que oirán al dormir y al despertar, cuando duerman y cuando sueñen, cuando amen y cuando odien, tu música será su vida y en sus vidas siempre estarás, por millones de días. Vivirás por el amor, porque tu música será el amor y todo eso se convertirá en una experiencia maravillosa. Serás el único ".

El joven Príncipe reflexionó por lo que acababa de ocurrir, se quedó una noche solo y vió el futuro y le gustó. Vió su palacio al que llamaría Paysley Park, se vió actuando alrededor del mundo en un día, vió un símbolo por el que sería reconocido, vió la luna cereza bajo la que cantaría, vió muchas guitarras a las que daría un nombre, vió a mucha gente coreando y bailando sus canciones, y presa de un súbito impulso reunió la fuerza y el valor que llevaba tanto tiempo buscando y gritó alto y claro "Soy el Príncipe y soy funky  ".

Los periódicos de la mañana dieron la noticia "el Príncipe Púrpura reinaba en la música funky" y a partir de ese día aquel país, donde la música era lo más importante, tuvo un Gran Príncipe al que todos adorarían.

Y como en todos los cuentos con final feliz, desde ese día  su música nos acompaña día y noche y desde entonces las niñas ya no soñamos con Príncipes azules.

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

                                  ;)Cat05.-

[DMSR]

había nacido con un don especial

Siempre es importante dejarse llevar por los dones especiales  . Gracias por el cuento, espero que a tu sobrina (y a tu hermana) también le guste 

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hala es una caña

[openbook]

había nacido con un don especial

Siempre es importante dejarse llevar por los dones especiales .

Y cat, me encanta el trocito de los duendes...     

[Shockadelica]

Muy bonito, cat...  a mí también me ha gustado la parte de los duendes 

[Babyknows]

Cat, podías venirte a contarle esa historia a mis niños....    es más, igual te la tomo prestada y la leo mañana en clase1 

Gracias x compartir con nosotros... 

[cat]

es más, igual te la tomo prestada y la leo mañana en clase1

No sabes cuanta ilusión me haría 

Gracias a todos por los mensajes